Eso sí, las buenas noticias terminan aquí, pues la compañía también ha confirmado que se cobrará un canon para jugar a títulos de segunda mano. La consola detectará cuando un juego utilizado sea instalado en una cuenta distinta y cobrará una cantidad a los usuarios cuando se quiera asociar el título a una cuenta nueva.
Pero la buena noticia es que en aquellos sitios donde la conexión no sea buena no habrá problemas en la experiencia de juego (siempre que no se trate de juego en línea, claro). Ésta fue una de las principales críticas que se hacían a Microsoft cuando se comenzó a especular con la posibilidad de que la consola exigiese una conexión permanente.
Finalmente no será así, pero lo cierto es que sorprende que la compañía no lo comentase en su presentación, pues es una característica que realmente preocupaba a los usuarios. De todos modos, se puede comprender, pues parece los de Redmond han querido ser el contrapunto al evento de Sony en todo momento con una presentación corta, concisa y en la que nada más comenzar pudimos ver la nueva consola.
De todos modos, aunque no sea imprescindible una conexión permanente en Xbox One, sí será conveniente que el dispositivo tenga acceso a Internet en todo momento si se quiere disfrutar de la gran mayoría de sus nuevas características. Microsoft quiere hacerse con el salón, pero nunca podrá lograrlo con un equipo que no sea capaz de proporcionar las mismas funciones que un televisor inteligente. Y, para ello, el primer paso es la conexión.
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Entre grandes anuncios, un hardware espectacular y títulos muy atractivos, una noticia ha opacado un poco la presentación de la nueva Xbox One, relacionada a uno de los rumores y temores que habían circulado por la web en los últimos meses. Finalmente, Microsoft cobrará un canon a los usuarios por jugar juegos de segunda mano, dado que cada título será asociado a una cuenta de usuario, lo que supone que al momento de activar el título con otra cuenta, se deberá pagar una cuota para que permita instalarlo.
La primera mala noticia relacionada con esta consola de sobremesa la vimos llegar al Microsoft anunciar lafalta de retrocompatibilidad de juegos de Xbox 360 con Xbox One, algo que tiene como explicación la diferencia de arquitectura de una consola con la otra. Sin embargo, en lo relacionado a los juegos de segunda mano es un punto más delicado, que limitará muchísimo algo tan sencillo y tan común como prestarnos o intercambiar juegos entre amigos.
Los juegos de Xbox One deben ser instalados en el disco duro, por lo que si un jugador desea instalar un juego que ya fue activado por otro, y por ende asociado con su cuenta, lo podrá hacer, pero deberá de pagar un canon para ello, por un monto que aún no está definido.
Esto sin duda se trata de un golpe directo al mercado de juegos de segunda mano, la renta de juego e incluso la posibilidad de prestar a un amigo un título una vez que ya lo completamos. Tener que pagar a Microsoft (o al desarrollador) por jugar un juego usado, podría eliminar por completo estas posibilidades, algo que no será tomado de buena manera por la comunidad.
Por otro lado, aunque no han dado detalles ni comentarios al respecto, el rumor sobre la conexión constante a internet en Xbox One si parece quedar descartado.
La primera mala noticia relacionada con esta consola de sobremesa la vimos llegar al Microsoft anunciar lafalta de retrocompatibilidad de juegos de Xbox 360 con Xbox One, algo que tiene como explicación la diferencia de arquitectura de una consola con la otra. Sin embargo, en lo relacionado a los juegos de segunda mano es un punto más delicado, que limitará muchísimo algo tan sencillo y tan común como prestarnos o intercambiar juegos entre amigos.
Los juegos de Xbox One deben ser instalados en el disco duro, por lo que si un jugador desea instalar un juego que ya fue activado por otro, y por ende asociado con su cuenta, lo podrá hacer, pero deberá de pagar un canon para ello, por un monto que aún no está definido.
Esto sin duda se trata de un golpe directo al mercado de juegos de segunda mano, la renta de juego e incluso la posibilidad de prestar a un amigo un título una vez que ya lo completamos. Tener que pagar a Microsoft (o al desarrollador) por jugar un juego usado, podría eliminar por completo estas posibilidades, algo que no será tomado de buena manera por la comunidad.
Por otro lado, aunque no han dado detalles ni comentarios al respecto, el rumor sobre la conexión constante a internet en Xbox One si parece quedar descartado.
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